Prensa Agrotime: Las mascotas son animales que viven en el entorno del hombre, tienen identidad propia y personalidad que incluso varía de acuerdo a la especie, raza, edad y ambiente donde se desenvuelven. Tener una mascota, requiere aceptar la responsabilidad que esto conlleva, responsabilidad que recae casi siempre en un adulto, ya que si una mascota no se cuida y/ o no se controla en forma adecuada pasa a constituir un peligro sanitario para el individuo, su familia y para la sociedad.
Si bien las mascotas pueden compartir ambientes con el hombre, no hay que olvidar que son especies diferentes, por lo que hay que cuidar el no traspasar o romper las barreras naturales de protección biológica de cada especie. Es bueno recordar que las mascotas deambulan por diversos ambientes, en los cuales pueden tener contacto y adquirir diversos agentes infecciosos y además pueden actuar como vectores mecánicos, llevando agentes infecciosos en su pelaje o saliva. Por ello, es muy importante cuidar la limpieza de los espacios físicos donde deambulan, como patios y plazas.
En otras ocasiones, las infecciones pueden transmitirse a través de artrópodos (garrapatas, pulgas, ácaros, etc.,) que actúan como vectores biológicos o mecánicos. Para mantener comunidades humanas saludables, es necesario conocer las características más relevantes de las mascotas y fomentar la tenencia responsable de ellas. El dueño de una mascota, que debe ser un adulto, tiene la responsabilidad frente al animal y la comunidad de satisfacer las necesidades de alimentación y protección básicas de su mascota. Debe asimismo procurarle un entorno saludable, desde el punto de vista físico, biológico y mental.
El ser humano puede adquirir parasitosis de una mascota a través de la ingestión accidental de diversos estados parasitarios: huevos, larvas y otras, que se encuentran en el ambiente como tierras o aguas contaminadas con deposiciones de animales o a través del contacto directo con la mascota pelaje, mucosas. Las mascotas pueden también tener ectoparásitos artrópodos como insectos o arácnidos que pueden actuar como vectores mecánicos y o biológicos de infecciones para el hombre.
La severidad de las infecciones virales, parasitarias y bacterianas que pueda adquirir una persona es variable, y depende del tipo de agente, la vía de ingreso, la edad y el estado inmunológico del huésped. Los más susceptibles a adquirir infecciones transmitidas por mascotas son: niños y ancianos, personas carentes de cuidados sanitarios e higiene personal, personas inmunodeprimidas de diverso origen como trasplantados, pacientes oncológicos o con tratamiento esteroidal crónico, infección por VIH avanzada y propietarios de mascotas que no acostumbran a desparasitarlas y controlarlos con veterinario regularmente.
De allí que para evitar infecciones transmitidas por mascotas es recomendable que las personas:
No introduzcan en su boca objetos como lápices, juguetes, u otros, ni los manipulen con las manos sucias.
Laven frutas y verduras antes de ingerirlas.
No se sienten, recuesten o jueguen en sitios contaminados con deposiciones de perros y gatos
Se laven bien las manos después de jugar o alimentar a la mascota. • Eviten el contacto directo con animales infectados.
Se laven bien las manos de manera rutinaria.
Es importante destacar que el manejo de las deposiciones de la mascota debe ser estar a cargo de un adulto inmunocompetente Las embarazadas no deben manejar las deposiciones ni secreciones especialmente de gatos y hámster.