La miel es un producto rico en azúcares, cuya sustancia constituye una fuente de energía rápida y saludable. De hecho, se trata del alimento más energético que proporciona la naturaleza. La composición de la miel consiste en una mezcla de fructosa, sacarosa, maltosa y glucosa, que son unas clases de azúcares, agua, aceite y unas enzimas especiales que producen las abejas. Este alimento natural puede tener diferentes colores y sabores dependiendo de la antigüedad de la misma y de la clase de flor de donde el néctar fue extraído. La miel es uno de los alimentos más fáciles de digerir y de propiedades curativas reconocidas, como el tratamiento de faringitis debido a su textura suave y espesa que suaviza la garganta. Debido a que la miel tiene la habilidad de absorber el aire, también se emplea para humedecer en los productos de repostería entre otras cualidades.